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OJUEM | Segunda temporada 2023 | Programa 3 El Aleph. Festival de Arte y Ciencia

OJUEM | Segunda temporada 2023 | Programa 3 El Aleph. Festival de Arte y Ciencia

En el marco de El Aleph. Festival de Arte y Ciencia, con el tema Violencia y cultura de paz, la OJUEM presenta un programa centrado en las Marchas de duelo y de ira de Arturo Márquez, obra comisionada por la UNAM para el 40 aniversario de la matanza de Tlatelolco en 1968. Esta obra, una respuesta a la violencia de estado en nuestro país, se contrasta con el tranquilo Concierto núm. 11 de Haydn, interpretado por el pianista Mijail Hallak. Este concierto sobre violencia y paz cierra con la Primera sinfonía de Chaikovski, conocida como Ensueños de invierno.

Agradecimientos
Participantes

Orquesta Juvenil Universitaria Eduardo Mata / Gustavo Rivero Weber, director artístico / Mijail Hallak, piano

Programa

Arturo Márquez (1950)
Marchas de duelo y de ira
Duración aproximada: 15 minutos

Franz Joseph Haydn (1732-1809)
Concierto para piano núm. 11 en re mayor, Hob XVIII: 11
I. Vivace
II. Un poco adagio
III. Rondo all'ungarese. Allegro assai
Duración aproximada: 18 minutos

Intermedio

Piotr Ílyich Chaikovski (1840-1893)
Sinfonía núm. 1 en sol menor, Op. 13, Ensueños de invierno
I. Ensueños de un viaje invernal. Allegro tranquillo
II. Tierra desolada, tierra de la bruma. Adagio cantabile ma non tanto
III. Scherzo. Allegro scherzando giocoso
IV. Finale. Andante lugubre - Allegro moderato - Allegro maestoso
Duración aproximada: 45 minutos

Duración aproximada total: 78 minutos

Semblanza de los participantes

Gustavo Rivero Weber
Director artístico
En poco tiempo Gustavo Rivero Weber ha llevado a la OJUEM a ser reconocida como una de las mejores orquestas del país, y que ha destacado internacionalmente con conciertos en Italia y Nueva York. En 2019, Rivero Weber tuvo su debut discográfico como director de orquesta con una grabación de música mexicana, El árbol de la vida, para el sello Naxos, que tuvo muy buena repercusión en la crítica especializada. Su formación en la técnica de dirección orquestal fue con Avi Ostrowsky, Alun Francis y Jan Latham-Koenig. Ha dirigido con éxito a orquestas en México, Austria, Hungría, República Checa, España y Argentina. Es egresado del Instituto Curtis de Filadelfia, en donde estudió con Jorge Bolet y en el Conservatorio Estatal de Odesa en Ucrania. Ha grabado varios discos para piano con música mexicana, latinoamericana y europea, además de uno dedicado a la música de Friedrich Nietzsche.

Mijail Hallak
Piano
Pianista, productor e instructor de ópera, Mijail Hallak estudió en el Conservatorio Real de Bruselas para después titularse con un diploma superior de piano en el Conservatorio Real de Mons, y pasar con distinción en el Conservatorio de Maastricht. Entre sus numerosas presentaciones alrededor del mundo, se incluyen 22 veces en el Carnegie Hall. Además de su trayectoria de solista, ha sido pianista acompañante e instructor de ópera en más de 40 producciones para compañías en Estados Unidos, Puerto Rico, Francia e Israel. Ha sido productor de diversos espectáculos y festivales. Grabó un disco de transcripciones para violín y piano de Jascha Heifetz con Leor Maltinski. Actualmente reside en la Ciudad de México.

Notas al programa

El festival El Aleph de este año nos propone reflexionar sobre violencia y cultura de paz. Las Marchas de duelo y de ira de Arturo Márquez, al inicio de este programa, abren esta conversación al tocar una herida profunda de nuestro país: la hasta ahora impune masacre de Tlatelolco en 1968. Es imposible no dejarse conmover por la rabia y el dolor encarnadas en esta pieza, en la que un ostinato con el ritmo de la consigna “Dos de octubre, no se olvida” marca insistentemente la pauta de un recuerdo vivo y vigente, de una violencia pasada y presente.

Esta obra es contrastada con el Concierto para piano núm. 11 de Haydn, que representa el status quo de la élite social para la que escribía el compositor austriaco. Incluso en sus conciertos, Haydn escribió obras en la que se valoraba el estilo, el buen gusto y una dosis de improvisación por encima del virtuosismo. Un primer Vivace presenta un diálogo animado entre la orquesta y el teclado, seguido por un Adagio en la que las cuerdas acompañan una lírica aria del piano. El Rondo all'ungarese, basado en una canción croata y no húngara, resultó ser lo suficientemente exótico para agradar al público vienés de su época.

El concierto concluye con uno de los pininos de Chaikovski, su Primera sinfonía, que le tomó varios años atreverse a publicar y a la que puso el cursi título Ensueños de invierno. Más que ser programáticos, los títulos de los movimientos buscan evocar una atmósfera en el oído de quien las escucha. Este Chaikovski fresco y franco con sus mundos sonoros de ensueño se presenta con cierta ironía en el marco de este festival, considerando la nueva ola de violencia y brutalidad desatada por la invasión de su país natal sobre Ucrania.

Notas: Elisa Schmelkes

21 de mayo
Sala Nezahualcóyotl, Centro Cultural Universitario
6:00 p. m.