Orquesta Juvenil Universitaria Eduardo Mata / Gustavo Rivero Weber, director artístico / Héctor Fernández, oboe

Claude Debussy (1862-1918)
Children’s Corner (El rincón de los niños)
Arreglo: André Caplet
I. Doctor Gradus ad Parnassum
II. Jimbo's Lullaby
III. Sérénade for the Doll
IV. The Snow Is Dancing
V. The Little Shepherd
VI. Golliwogg's Cake-walk
Duración aproximada: 17 minutos

Ralph Vaughan Williams (1872-1958)
Concierto de oboe y cuerdas en la menor, IRV 50
I. Rondo Pastorale. Allegro moderato
II. Minuett and Musette. Allegro moderato
III. Finale, scherzo. Presto
Duración aproximada: 19 minutos

Héctor Fernández, oboe

Intermedio

Johannes Brahms (1833-1897)
Sinfonía núm. 3 en fa mayor, Op. 90
I. Allegro con brio
II. Andante
III. Poco allegretto
IV. Allegro
Duración aproximada: 34 minutos

Duración aproximada total: 70 minutos

Gustavo Rivero Weber
Director artístico
Fundador y actual director artístico de la Orquesta Juvenil Universitaria Eduardo Mata (OJUEM), Gustavo Rivero Weber ha logrado posicionar a la agrupación como una de las mejores orquestas del país, y que ha destacado internacionalmente con conciertos en Italia y Nueva York. Es egresado del Instituto Curtis de Filadelfia, donde estudió con Jorge Bolet, y del Conservatorio Estatal de Odesa en Ucrania. Su formación en dirección estuvo a cargo de Avi Ostrowsky, Alun Francis y Jan Latham-Koenig. Además de México, ha dirigido orquestas en Argentina, Austria, España, Hungría y la República Checa. En 2019, tuvo su debut discográfico al frente de la OJUEM para el sello Naxos, con una grabación de música mexicana titulada El árbol de la vida que obtuvo buen recibimiento por parte de la crítica especializada. Además de su carrera de director de orquesta, Rivero Weber ha grabado varios discos de piano que abarcan repertorio mexicano, latinoamericano y europeo, entre los que destaca uno dedicado a la música de Friedrich Nietzsche.

Héctor Fernández
Oboe
Originario de Ciudad Valles en San Luis Potosí, Héctor Fernández Purata estudió en la Escuela de Música de la Universidad de Guanajuato con Gijsbertus de Graaf. Ha tomado clases con Ingo Goritzki, Yeon-Hee Kwak, Hansjörg Schellenberger, Thomas Indermühle, Nick Deutsch, Christoph Lindemann y Alex Klein. Ha tocado en orquestas como la Sinfónica Nacional, la Sinfónica de Minería, la Filarmónica de la UNAM y la Filarmónica de Jalisco, entre otras. Ha sido solista con la Orquesta Sinfónica de la Universidad de Guanajuato y la Sinfónica de Xalapa. Fundó el Ensemble Zephyrus, con el que ha participado en el Festival Internacional de Música de Cámara de San Miguel de Allende, el Internacional Cervantino y el de Música Clásica por los Caminos del Vino 2013 de Mendoza en Argentina. E dos ocasiones ha recibido el apoyo a intérpretes del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes. En 2017, grabó su primer disco titulado 5:1 Música nueva para oboe y corno inglés, con un apoyo del Instituto Cultural de León, Guanajuato. En 2019, fundó el Guanajuato Bach Festival y el Bach Consort Guanajuato junto a Gijsbertus de Graaf. Desde 2003 es integrante de la Orquesta Sinfónica de la Universidad de Guanajuato.

Orquesta Juvenil Universitaria Eduardo Mata
La Orquesta Juvenil Universitaria Eduardo Mata (OJUEM) de la UNAM es un ensamble sinfónico fundado en 2012 que reúne a varios de los jóvenes músicos más destacados y talentosos del panorama nacional. Sus integrantes tienen una intensa práctica orquestal, y además participan en clases magistrales impartidas por reconocidos solistas, seminarios de música de cámara y talleres seccionales. La orquesta lleva el nombre de Eduardo Mata, director de la OFUNAM entre 1966 y 1976. La OJUEM tiene su sede en la Sala Nezahualcóyotl de Ciudad Universitaria. Además, realiza giras por las escuelas, preparatorias, facultades y otras dependencias de la Universidad. Ha ofrecido conciertos en Michoacán, Querétaro, Morelos, Estado de México, Guerrero y Guanajuato. Ha realizado dos giras internacionales, una por Italia con presentaciones en Roma y Merano en 2015, y otra en Nueva York. En 2019, salió al mercado su primer disco, El árbol de la vida, con música de Moncayo, Revueltas y Hebert Vázquez, entre otros compositores. El primer director artístico de la OJUEM fue Jan Latham-Koenig y actualmente es Gustavo Rivero Weber. Ha actuado bajo la batuta de directores huéspedes como Enrique Bátiz, Avi Ostrowsky, Massimo Quarta, Ronald Zollman, Enrique Arturo Diemecke, Bojan Sudjić y Rodrigo Macías, por mencionar algunos. Entre los solistas que han colaborado con la Orquesta se puede mencionar a Pascal Rogé, Roberto Díaz, Jorge Federico Osorio, Manuel Ramos, Erika Dobosiewicz, Makoto Ueno, Fernando de la Mora, Nikolai Khoziainov y Pablo Garibay, entre otros.

Gustavo Rivero Weber, director artístico

Violines primeros
Isaac Martínez
Emmanuel Bautista
Alberto Gamboa
Efraín Benavides
Javier Carranza
Israel Coyoc
Édgar Román
Leopoldo Mendoza
Juan Pablo Ortega
Diana Ayón
Erick Álvarez
Belem Espitia
Guadalupe Aguirre

Violines segundos
Iván Núñez
Aaron Jiménez
Lenin Gallardo
Armando Frost
Nubia Torres
Maya García
Sarahí Barranco
Taisha González
Juan Pablo Ramírez
Claudio Zepeda
Milton Carrera

Violas
Marco Inda
Katherine Jones
Edgar Venegas
Mariana de Jesús Núñez
Marlene Lara
Isela del Ángel Vega
Francisco Esparza
Samuel Rojas

Violonchelos
Emiliano Núñez
Rosa Lira
Erick A. Villa
Alejandro Cruz
Mario Nucamendi
Alanís Pérez
Pablo Montero
Georgy Diorditsa

Contrabajos
Federico Macchetto
Ricardo Caminos
Salvador Mena

Flautas
Arleth Arpide
Arihan Cornejo

Oboes
Rebeca Ornelas
Daniela Sierra

Clarinete
Gabino Salas

Fagot
Alaide Najera

Cornos
Diego Sánchez
Gabriel Mendoza
Ángel Herrera
Donovan Medrano

Trompetas
Hayden Cornejo
Roberto Durán

Trombones
Brandon Flores
Aleksei Arreola

Tuba
Emmanuel Chavarría

Percusiones
Javier Guzmán

René Báez
Gerente

Eduardo Barrera
Coordinador de Becarios

Rodrigo Julkim Mendoza
Bibliotecario

Alfredo Mendoza
Asistente

Samuel Romero
Sergio Honorato
Técnicos

Claude Debussy (1862-1918)
Children’s Corner (El rincón de los niños)
Debussy completó Children's Corner en 1908. Originalmente escrita para piano solo, esta suite de seis movimientos fue dedicada a su pequeña hija Claude-Emma. Tres años después, su amigo André Caplet la orquestó. Aunque no es tan conocido, Caplet fue un talentoso compositor y director de orquesta que llevó varias obras de Debussy a los terrenos orquestales, como el famoso Claire de lune. Algunas personas creen que Debussy concibió estas piezas para que su hija las interpretara más adelante, mientras que hay quien sugiere que fueron concebidas para ser tocadas mientras la niña estaba a su lado en el piano. En cualquier caso, los nombres actúan como un programa para el escucha, quien puede imaginar: agitados pasos hacia el Parnaso; el pesado andar de Jimbo, el elefante; la serenata a una muñeca china; una danza de copos de nieve; un pastor sonando su silbato y, en el último movimiento, una elegante interpretación francesa de la música popular estadounidense del siglo XIX.

Ralph Vaughan Williams (1872-1958)
Concierto de oboe y cuerdas en la menor
Ralph Vaughan Williams emprendió la creación de su Concierto para oboe y cuerdas en 1943, por encargo de la BBC de Londres para los Promenade Concerts. La interpretación de la obra estaría a cargo de uno de los oboístas más respetados a principios del siglo XX, Leon Goossens, quién trabajó de cerca con el compositor y dejó una marca indeleble en la obra. El estreno, programado a inicios de julio de 1944, fue retrasado por los bombardeos a Londres durante la Segunda Guerra Mundial. Finalmente se realizó en Liverpool en septiembre de ese año. La obra, considerada por Goossens como una "pastoral inglesa", entreteje temas populares británicos que evocan paisajes campestres y que establecen bellos diálogos entre el solista y la orquesta, al tiempo que destacan la maestría técnica y expresiva del oboe.

Johannes Brahms (1833-1897)
Sinfonía núm. 3 en fa mayor, Op. 90
A pesar de ser su sinfonía más breve, la Tercera sinfonía de Brahms destaca como un paradigma de unidad estructural. El compositor tenía 50 años al escribir su Opus 90, y recurrió a los recuerdos de su juventud al adoptar un lema musical que dio lugar a la sucesión de notas F-A-E (que corresponden a fa, la y mi en español), que significaban: “frei aber einsam” (libre pero solo). Estas notas se convirtieron en las generadoras de toda la sinfonía, y fueron llevadas al extremo en sus cuatro movimientos. Al igual que nuestras memorias, la nostalgia del ayer impregna el dramatismo musical de la obra, que va desde lo amoroso a lo melancólico, de la pasión al heroísmo y culmina en una serena victoria. Quizá por ello Clara Schumann expresó al escuchar la sinfonía: “Todos los movimientos parecen ser de una sola pieza, un latido del corazón."

Notas: Montserrat Pérez-Lima